MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

miércoles, 10 de octubre de 2012

¡Felicidades, Gonzalo!


El conflicto eclesial sigue azotando a la mayoría de los católicos en el Vicariato de Sucumbíos. Quiero recordar a monseñor Gonzalo López que cumple años en España y su compromiso por una Iglesia fiel al Cristo del Reino, al servicio de los pobres y de los pueblos nativos, organizada democráticamente, animada por miles de servidores y ministros laicales reconocidos. Retomo el testimonio de un viejo amigo, Anastasio, que escribe para él.

“Hace 79 años, un día como hoy, nació quien más tarde sería monseñor Gonzalo López Marañón, vicario apostólico de San Miguel de Sucumbíos. O mejor dicho, el Obispo de Lago Agrio. ¿Cómo felicitar hoy a Gonzalo porque cumple 79 años? Pues, la verdad es que no sé cómo felicitarle sin felicitarme yo y felicitarnos quienes le hemos conocido.

Yo le conocí en el año 1958, recién llegado de Roma donde había estudiado un curso de espiritualidad. Y luego vivimos en la misma casa durante cinco años. O sea que le conozco un poco y desde los primeros años de su sacerdocio. Le conocí joven, entusiasta, con la cabeza bien dura. Y todos le hemos conocido de obispo y la cabeza no se le ha ablandado: lo que se propone lo consigue. Ha caminado la selva, ha navegado por el Aguarico y otros ríos, se ha subido en avionetas, recorrido picas, trochas y caminos. Ha construido escuelas, capillas, dispensarios.

Y ha pasado muchas horas en oración “a solas con quien sabemos nos ama”. Ha cantado, llorado y reído. Ha amado y nunca ha odiado. Ha ayunado para buscar la reconciliación. Y no sé si habrá llorado viendo el dolor y diciendo lo mismo que San Francisco de Asís luego de hablar para parar la cruzada de su tiempo: “El amor no es amado”. Por eso, Gonzalo, nuestro obispo, nuestro hermano: Felicidades en tu cumpleaños.

No nos arrepentimos de haber caminado junto a ti durante 40 años. Seguiremos caminando tratando de ser fieles a nuestro Dios. Y como eres carmelita, sabemos de la “Noche Oscura”.

El papa Juan 23 decía hace 50 años antes del Concilio Vaticano 2º: “Yo salté de la barca y camino entre las olas al encuentro de Cristo. La Iglesia debe abandonar la seguridad de la barca y caminar entre las olas. Llegará la noche, la tempestad, el miedo, pero no hay que retroceder. La Iglesia está llamada a ir al encuentro del mundo”. Juan 23, Gonzalo y otros han cumplido lo que decía el mismo Jesús a Pedro: “Anda mar adentro”. Que sepamos orientarnos por estos ejemplos.

¡Gracias, Gonzalo! ¡Adelante, Iglesia-Pueblo de Dios de Sucumbíos!