MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

miércoles, 28 de febrero de 2018

Óscar Elizalde Prada: ¿Viri probati? Baldisseri sugiere “una ministerialidad adecuada a las circunstancias” en la Amazonía

Óscar Elizalde Prada 
VIDA NUEVA DIGITAL
  • El secretario general del Sínodo de los Obispos invita a dar más espacio a los diáconos permanentes: “Es necesario asegurar un guía para las comunidades diseminadas”
  • “La atención a los pueblos originarios es una prioridad”, ha dicho el cardenal
  • En una entrevista a L’Osservatore Romano destaca el papel que tendrá la REPAM en el foro vaticano de 2019

A tres semanas de la visita apostólica de Francisco a Puerto Maldonado, en la Amazonía peruana, cuando también tuvo lugar la primera reunión preparatoria del Sínodo para la Panamazonía que se celebrará en octubre de 2019, L’Osservatore Romano publica en su edición del 9 de febrero, una entrevista con el cardenal Lorenzo Baldisseri, secretario general del Sínodo de los Obispos, a propósito de los primeros pasos que se están dando.
 
Aparecida y la REPAM

El hálito inspirador de Aparecida (2007) y la “experiencia consolidada de reflexión sobre la gran temática amazónica”, por parte de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), se perfilan como columnas fundamentales de la etapa pre-sinodal inaugurada en Puerto Maldonado.

Así lo ha referido Baldisseri, quien además ha señalado, como “novedad”, que esta fase preparatoria será liderada “por el secretario general en estrecha colaboración con la REPAM”.

Al confirmar que los desafíos que representa la evangelización de la Amazonía, en su vasta extensión de 7,5 millones de km2 –que involucra a Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guayana, Guyana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela–, con una atención particular a los pueblos indígenas y a las comunidades locales, hace parte de la agenda del sínodo, el secretario general también subrayó la problemática ecológica y del cuidado de la creación.

“Debemos reconocer que en la Amazonía hay una pluralidad de culturas”, amén de otras “culturas superpuestas”, ha dicho el cardenal, sin desconocer que “hay más de cien circunscripciones eclesiásticas” que son testigos del rostro multifacético de la Iglesia en la Amazonía.

Los pueblos originarios como prioridad

Con todo, “la atención a los pueblos originarios es una prioridad, teniendo en cuenta las indicaciones del Pontífice”, ha dicho Baldisseri, haciéndose eco de la insistencia de Francisco sobre la necesidad de preservar –y no solo respetar– su tradición y su cultura, lo mismo que sus tierras, amenazadas por el extractivismo, el agronegocio y los voraces intereses económicos que amenazan el bioma panamazónico y la vida de sus pueblos.

“La Iglesia debe evangelizar a través de la promoción humana, un elemento típico de la acción pastoral en América Latina”, apuntó el cardenal, señalando, además, que “la denuncia profética tiene un valor para la promoción humana y la credibilidad de la evangelización de la Iglesia”, con lo cual, no dudó en ponderar la importancia del método ver-juzgar-actuar, también propio de la Iglesia latinoamericana.

“Más espacio al diaconado permanente”

Con sensibilidad pastoral, el secretario general del Sínodo de los obispos, también se refirió a la urgencia de dar “más espacio al diaconado permanente”, sin referirse expresamente a la opción de los ‘viri probati’. “Es necesario enfrentar el problema de cómo asegurar la presencia de un guía para las comunidades diseminadas”, dijo. Una “ministerialidad adecuada a las circunstancias” es más que imperativa.

Se espera que para el mes de junio las conferencias episcopales reciban el documento preparatorio. Encontrar los medios adecuados para la participación activa de los sujetos que habitan el bioma panamazónico, una reflexión teológico-pastoral pertinente a una acción pastoral con ‘rostro amazónico’, en comunión con la Iglesia universal, y abordar aspectos específicos del ministerio eclesial que responden a las necesidades de la región amazónica, hacen parte de las expectativas del cardenal Baldisseri.

miércoles, 21 de febrero de 2018

Pedro Pierre - CUBA: EJEMPLO DE DEMOCARCIA,



Pedro Pierre

La palabra democracia significa “gobierno del pueblo”, o sea, el pueblo gobierna directamente. En Ecuador no es el pueblo que pone los candidatos, sino los partidos políticos. En estos casos se trata de un ejercicio de ‘democracia representativa’. Para mejorar la democracia ‘participativa’, los partidos hacen ‘elecciones primarias’ donde se designa a quiénes serán los candidatos en los puestos provinciales y nacionales; lastimosamente no siempre se respeta esta modalidad. De todo modo, falta un eslabón: el de las bases, o sea, la elección directa por los ciudadanos de quiénes van a ser los candidatos. Los partidos políticos nos roban la democracia plena: Estamos en una democracia ‘restringida’.

En El Telégrafo del 11 de enero, el embajador de Cuba en Ecuador nos explicó que, en su país, las elecciones presidenciales comienzan en “las asambleas barriales” que eligen a los posibles candidatos. Una segunda elección se da al nivel de “asambleas provinciales donde se elige a quienes van a ser sus representantes a presidente nacional”. Allí “participa el 90% de la población”. La última etapa es la elección del presidente “por estos delegados provinciales”.

Nos explica también el señor embajador que se trata de “elecciones populares y no políticas”, en el sentido que las elecciones comienzan en la base y no mediante partidos políticos. “El partido comunista en el gobierno no participa ni hace propaganda proselitista en nuestras elecciones”. Precisa que a todos los niveles “los candidatos son votados de manera secreta”. Por esta razón el gobierno de Cuba se enorgullece de haber llegado a un mayor nivel de democracia.

Un comienzo de democracia existe en la Biblia cuando, al salir de Egipto, el suegro de Moisés le sugería de elegir “entre los hombres del pueblo algunos que sean valiosos y que teman a Dios, hombres íntegros y que no se dejen sobornar”. Que el actual proceso de elecciones en Cuba nos ayude a reflexionar y avanzar hacia una mayor democracia.

lunes, 19 de febrero de 2018

Leonardo Boff: En Porto Alegre: no es ser petista, es ser justo y defender la democracia


Leonardo Boff

El enjuiciamiento de Lula por el juez de primera instancia, Sergio Moro, y su argumentación final están totalmente vacíos de pruebas concretas. Abundan las deducciones y convicciones subjetivas, inapropiadas al ethos de un juez imparcial. No se acusa a Lula de tener cuentas en el exterior, que nunca tuvo, ni de haber desviado fortunas del erario en beneficio propio. Nada de eso. Se trata de un apartamento de tres pisos en Guarujá sin mayores calificaciones y de una finca en Atibaia, modesta, como modesta era la vida de su esposa María Leticia a la que, hija de agricultores, le gustaba cultivar la tierra.

Las alegadas intervenciones de Lula junto a Petrobrás en favor de la constructora OAS, que a cambio le habría dado el triplex en Guarujá-SP, no se confirmaron. La solución fue entonces la invención de una justificación esdrújula y hasta vergonzosa para un juez mínimamente serio. Escribió: «si no hubo intervención de Lula, hubo sí un acto de oficio indeterminado». Esto equivale a decir: un acto no conocido y por eso inexistente. ¿Cómo puede un juez decidir sobre algo que él mismo no conoce? La situación colocó al juez Moro en dificultades cuando se hizo público que la OAS en negocios hechos en Brasilia empeñó el apartamento de Guarujá, signo de posesión y dominio del inmueble. Por lo tanto, no podía ser de Lula.

El hecho es que no se ha identificado ningún crimen de Lula, mucho menos cuentas en offshores.

Lo que ha quedado claro como la luz del sol es la voluntad condenatoria del juez Sergio Moro y de aquellos en cuyo nombre está actuando: las clases adineradas, el PSDB y parte significativa del PMDB con Temer al frente.

No se puede usar metáforas y ocultar el discurso con malabarismos. Tenemos que decir abiertamente que hubo un golpe parlamentario-jurídico-mediático, hegemonizado por los grupos altamente adinerados (0,05% de la población) que controlan gran parte del área económica y mantiene al Estado rehén de los altos intereses que le cobran para que pueda cerrar sus cuentas. La verdad cristalina es que la elite dominante (según L.G. Belluzzo, no es élite, sólo hay ricos) comenzó a darse cuenta de que el poder proveniente del piso de abajo, con Lula, el PT y aliados, podría consolidarse y cambiar el rumbo del país con políticas sociales de inclusión de millones de pobres, amenazando así sus privilegios. Como siempre han hecho en la historia, organizaron un golpe.

No hay que olvidar la afirmación muchas veces repetida de Darcy Ribeiro que nuestras clases opulentas y dominantes son las más reaccionarias y antisociales del mundo. Nunca pensaron un Brasil para todos; ni siquiera tienen un proyecto de nación. Están contentos con lo que el Pentágono (que también está implicado en el golpe, según fuentes fidedignas) y las grandes corporaciones mundiales están imponiendo: la recolonización de toda América Latina, particularmente de Brasil. A estos, en la división mundial del trabajo, sólo les cabe ser exportadores de commodities. Este proyecto asumido por los que dieron el golpe no está sólo privatizando los bienes públicos. Están desnacionalizando nuestro parque industrial, el petróleo y otros commons brasileros. Están desmontando el país. El objetivo es abrir espacio a las grandes corporaciones a costa de la disminución del Estado, para que ocupen nuestro mercado de 200 millones de consumidores y puedan acumular de un modo excesivo a costa nuestra.

Alguien con más autoridad que yo, el economista Luiz Gonzaga Belluzo, en una entrevista fue al núcleo de la cuestión: El crimen de Lula, en realidad, fue dirigir un gobierno vuelto hacia los más pobres, un gobierno más popular y soberano, y eso, amigos y amigas, jamás será aceptado por la Casa Grande. Defender a Lula es defender la historia, es defender la justicia. No es ser petista, es ser justo.

Lo que se juega el 24 de enero en Porto Alegre con los tres jueces de segunda instancia que van a juzgar a Lula es la definición del futuro de nuestro país: si aceptamos ser nuevamente colonia o si rechazamos ese proyecto indigno y llevamos adelante el sueño de tantos años, ahora reforzado, de refundar en el Atlántico Sur un país robusto, autónomo, social y justo, que se propone sanar la herida que sangra hasta el día de hoy: millones y millones de personas, víctimas de la Casa Grande de ayer y de hoy, los abandonados por ser considerados ceros económicos, en su mayoría hijos e hijas de la senzala, ante los cuales tenemos una deuda humanitaria hasta hoy nunca saldada.

El pueblo está callado, pero está atento. Conoce los derechos que le han sido secuestrados y la carga que se le quiere poner sobre su espalda. Dependiendo de la decisión de los jueces de segunda instancia en Porto Alegre puede haber una especie de desbordamiento imparable.

A los jueces sólo les recuerdo las palabras de la Revelación: “La ira de Dios vendrá sobre aquellos que en la injusticia aprisionan la verdad” (Rom 1,18). El instrumento de la ira de Dios será, esta vez, la acción indignada del pueblo.

Por lo tanto, señores jueces de segunda instancia, traten de juzgar según la justicia para escapar de la ira de Dios y del furor del pueblo indignado.

viernes, 16 de febrero de 2018

Padre Pedro Pierre: ¿A dónde vamos ahora?


Padre Pedro Pierre

Pasó la consulta plegada de odios, mentiras y confusiones. En promedio el Sí ganó, pero el promedio de 64% obtenido no es una victoria contundente… lejos del 82% alcanzado por Rafael Correa durante su gobierno.

Los resultados del No llaman la atención: un promedio de 36%, llegando en Manabí y el exterior a superar el 50%. Si comparamos con las elecciones presidenciales del año pasado en la primera vuelta, vemos que Alianza PAIS ganó con el 38%. Eso significa que Correa tiene más o menos el mismo apoyo nacional que hace un año. Haciendo prospección de qué porcentaje tendría el presidente Moreno, apoyado por 16 partidos políticos y un sinnúmero de organizaciones sociales, dividamos por dos los 64% obtenidos. Llegamos a 32%, lo que es inferior a lo que alcanzaron los correístas. Notemos también que Rafael Correa bien puede postularse para alcalde, asambleísta o vicepresidente.

Ahora vienen los reclamos tanto nacionales como internacionales. La CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) pidió a la Corte Interamericana medidas provisionales que impidan la destitución del Consejo de Participación Ciudadana. Los reclamos vienen también al nivel nacional: todos los grupos que apoyaron el Sí ya reclaman sus ‘derechos’. Los de derechas quieren más neoliberalismo, los del centro más puestos estatales, los de izquierda nuevos cambios sociales. Muchas dificultades tendrá el Gobierno con sus 44 asambleístas para lograr alianzas en la Asamblea: la mayoría que necesita es de 30 asambleístas. Bien parece, como lo hacen notar los comentarios internacionales, que el Presidente quedó más débil con la consulta. ¿Cómo salir de esta intrincada situación? En sus 3 reuniones con las organizaciones populares, el papa Francisco ha repetido siempre que los principales protagonistas de un cambio social son los pobres, organizados en movimientos populares. Ese es el gran desafío para nuestro país: o se trabaja desde las organizaciones sociales o no habrá ningún cambio.

lunes, 12 de febrero de 2018

¡Santidad, llame a Casaldáliga por su 90 cumpleaños!

Únete a la campaña, lanzada por RD y el padre Ángel

Se lo tiene más que merecido el último profeta, obispo de los pobres y poeta místico


José M. Vidal

Querido Papa Francisco: Y lo de 'querido' no es una mera cortesía. Recuerdo que, cuando tuve la suerte de saludarlo, tras departir sobre diversos temas, nos despedimos, le besé el anillo, usted se marchaba y yo me quedé allí, sólo, en medio del pasillo de Santa Marta, tan emocionado que, de pronto, sentí una moción interior y me vi volviéndome hacia usted y diciéndole: '¡Santidad, le quiero!'. Una proclamación de amor, que me salió del fondo del alma y sin pasar por el tamiz del control mental. Sorprendido por mi propio gesto, me tranquilizó ver que usted se volvió y sonriendo (no sé si de gratitud o conmiseración) contesto: "Yo también te quiero". Y, durante unos segundos, volví a flotar.

En base a esta declaración de amor pública y recíproca, me atrevo a pedirle una cosa: que le haga una llamada telefónica a Pedro Casaldáliga con motivo de su 90 cumpleaños. Los cumple el día 16 de febrero. Seguro que tienen su teléfono en alguna oficina de la Santa Sede. O su amigo, el cardenal Hummes, que estuvo recientemente visitándolo en su casa de Sao Felix. O se lo puede pedir a Félix Valenzuela, a Ivo o a José de Jesús Saraiva, tres de los agustinos que lo cuidan y atienden las obras que el 'profeta del Araguaia' puso en marcha y sigue alentando, sentado en su silla y con la cabeza ladeada por el "hermano parkinson".

Hasta yo mismo lo tengo y, si me lo pide, cumpliría el sueño de volver a saludarlo...y reiterarle mi cariño a lo que usted es y representa en esta Iglesia del Vaticano II que renace de su mano.

Una llamada el día 16 (o antes o después, tampoco hay que exagerar) sería el mejor regalo de cumpleaños que pudiese tener Casaldáliga y, por extensión, sus amigos (que son muchísimos) y sus admiradores-seguidores, que son legión en todo el mundo.

Una llamada para un homenaje merecidísimo. Creo que se puede decir, sin temor a caer en la exageración, que nadie lo merece más que él. No hay eclesiástico vivo alguno que lo merezca más que él. Lo tiene todo. Es un santo vivo, de los que se hizo santo con y a pesar de su fuerte carácter, lo cual tiene más mérito.


Es cierto que, como bien sabe, lo de las devociones es algo muy particular, pero lo que nadie puede negar es que Casaldáliga es un profeta. El último profeta vivo. De la talla de Helder Cámara o de monseñor Romero, me atrevería a decir. De hecho, fue el primero en profetizar y en canonizar a 'San Romero de América' y elevarlo a los altares del pueblo latinoamericano, cuando las autoridades vaticanas recelaban de él y le hacían pasar lo que usted mismo llamó su "doble martirio".

Santo, profeta y obispo de los pobres. De esos obispos con olor a oveja que a usted tanto le gustan. Y, además, lo fue siempre. Y en tiempos en que esa forma de ser pastor no se llevaba. Incluso estaba muy mal vista. Tan mal vista que, desde las alturas vaticanas, se le reprochaba, se le llamaba a capítulo, se le marginaba y se le dejaba por imposible...allá, en su selva. Fue un obispo del Vaticano II con todas las consecuencias. Al servicio de una Iglesia-pueblo (de verdad, no sólo retóricamente) y de los más pobres de los pobres: indios, negros, campesinos...

Un obispo sin mitra ni báculo. Bueno, sí: Su mitra, un sombrero sertanejo; su báculo, un remo, su anillo, de tucum. Su casa siempre abierta para cualquiera, su vida expuesta. Por la liberación de los suyos estuvo muchas veces físicamente en peligro vital real. Quizás no lo matasen, porque, como dice el salmo, los ángeles le protegieron, porque está tocado por el dedo del Dios que escucha y le duele el clamor de su pueblo oprimido.


Un obispo único, especial, de la estirpe de los grandes obispos latinaomericanos: Arns, Lorscheider, Cámara, Romero, Méndez Arceo, Samuel Ruiz, Pironio, Angelelli, Gerardi, Proaño...Buena cosecha de mitrados sin mitra. De los que nunca fueron funcionarios de lo sagrado, de los que se ganan el corazón de la gente, de los que se entregan de verdad como el grano de trigo. De los que permanecen.

Porque a Casaldáliga, a pesar de haber militado en la cusa de los pobres toda su vida, la militancia no lo escupió, no lo cansó, no lo derribó. Ahí sigue, fiel a sus causas, que, como siempre dice, "valen más que mi vida". Don Pedro siempre estuvo en el mismo surco (el del Vaticano II), siempre aró con los mismos bueyes (los de la teología de la liberación), siempre rezó con su mística encarnada.

Porque, además de santo, profeta y obispo de los pobres, Casaldáliga es un gran poeta. Un poeta místico. Un poeta que el mismísimo Leonardo Boff compara nada menos que con San Juan de la Cruz. Sus poemas nos despiertan, nos sacuden las entrañas, nos revuelven por dentro, nos elevan a Dios y nos lanzan a la acción. Poesía mística para la acción.


Santidad, seguro que usted sabe todo esto y más de Casaldáliga. Por eso, hace un tiempo, dijo usted aquello de "decidle a Don Pedro que lo llevo en el corazón". Su llamada telefónica (o su carta) sería una forma más de demostrárselo. A él y a otros muchos que, en la Iglesia, le reconocemos como un referente, un icono, que merece ya de vivo y mientras vida la rehabilitación del Papa y el especial reconocimiento de Francisco.

No puedo erigirme en representante de nadie, pero sí le puedo asegurar que a Religion Digital llegan miles de sugerencias y peticiones de rehabilitación de Casaldáliga, para que se las transmitamos. Desde simples cristianos de base, a personajes tan conocidos y queridos como el Padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz.

Un aluvión de solicitudes que usted puede satisfacer con una simple llamada. La llamada del padre, del amigo, del Papa de los pobres, del Francisco de la primavera por la que Casaldáliga entregó su vida entera. El Papa al que llama "bendición de Dios". ¡Llame a Casaldáliga, Santidad! ¡Se lo merece!

Para los que quieran sumarse a esta petición, hemos creado el hastag #papallamaacasaldaliga

Para sumarse a la campaña, puedes firmarla aquí: