MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

martes, 30 de septiembre de 2014

A LOS CUATRO AÑOS DEL INTENTO DE GOLPE DE ESTADO EN ECUADOR. “LOS MIEDOS DEL SEÑOR FISCAL”.



Recordar ese intento de golpe de fuerza aun nos duele. Como lo debe hacer cualquier memoria de una infamia. Tiempo en demasía para haber hecho justicia. Pero que difícil ha sido y es conseguirla. Desde el mismo momento en que a pocas horas: “se barrió y limpió”, todo el escenario de los crímenes y una actuación fiscal más que dudosa, cínica, encabezada por el anterior titular de esa función, de lamentable recordación. Quedan muchas dudas, mientras los responsables de los muertos, lesionados, golpeados, de los saqueos y destrucción siguen por allí tan campantes.

Resulta enervante la impunidad de los autores intelectuales del hecho faccioso, pues si bien los ejecutores directos de la violencia han estado a la vista de todos, hay que dar con los “cerebros” de lo que sucedió. ¿Quiénes son? A riesgo de forzar hipótesis, no parece muy difícil ubicarlos:

-La embajada norteamericana. Sin ninguna duda ocupa el primer lugar. La recuperación del territorio invadido con la “Base de Manta”; la renegociación y eliminación de la deuda indigna, que impidió que los “buitres” se sigan engullendo al país; la renegociación de los contratos petroleros y la nacionalización de las ganancias extraordinarias que se cargaban las petroleras; la cercanía a Hugo Chávez y el ALBA; la política internacional soberana… en fin motivos de sobra para que el imperio actúe.

-Los banqueros; las mafias que se repartían “las comisiones” por la importación de combustibles; las mafias del contrabando y la droga; los eternos morosos del Impuesto a la Renta...

-Las grandes oligarquías de Guayaquil y Quito básicamente, acostumbradas a hacer de todo lo que pertenecía a los ecuatorianos: “negocios propios”.

-Las mafias de “izquierda” que se comían por los pies el sistema educativo; las “ONGS” con plata gringa sin control alguno; los “lideres” indígenas convertidos en comensales del reparto privado… Tuvieron sus sayones en policías y militares formados para castigar y matar a su pueblo…

Pero hay un grupo y a esto se debe la ironía que titula esta nota, al que “todo el mundo teme”: LOS MEDIOS COMERCIALES DE COMUNICACIÓN.

Hace unos días el señor Fiscal General del Estado, don Galo Chiriboga, de actuación honesta sin duda, empeñado como esta en que se haga justicia, afirmo algo que nos parece que desdice de su labor: “..NO, NINGUN MEDIO DE COMUNICACIÓN VA HA SER ENJUICIADO…NINGUN PERIODISTA INVESTIGADO… “Lo dijo con expresión de enojo y fuerza de voz. Preguntamos ¿y porque? ¿Cuál es la corona que esta gente tiene, que le coloca sobre los demás ciudadanos? ¿No somos todos iguales ante la ley? En los meses, semanas y días previos a la intentona ¿quién calentó el ambiente entre los policías y militares? ¿Quién mañana, tarde y noche azuzo a la violencia? ¿No estuvieron ellos antes de que salga el sol el día del ataque “montando cámaras”, donde más tarde el Presidente iba a ser secuestrado?

¿No fue en Ecuavisa donde el prófugo Galo Lara anunció lo que se venía ante la complacencia de sus “entrevistadores”? ¿No fue Abad, el indigesto hablador de Teleamazonas quien “instruía” a su compinche Paredes a que no filmen el rostro de los agresores? ¿No fue este mismo Paredes quien anunció ”los contactos y decisiones” de altos oficiales militares de sumarse al golpe? ¿Será de gana que los amotinados “exigían” que sea solo Teleamazonas quien pueda entrar al Hospital que habían tomado reteniendo por la fuerza al Presidente? Y luego de su fracaso, todos estos años ¿no han sido estos quienes han hecho lo imposible para impedir que se haga justicia, minimizando lo que sucedió, hasta casi convencernos que allí nunca paso nada? ¿y que solo fue una fiesta de disfraces?.

Los “medios” son los “perros de presa” de la gran oligarquía, es obvio que el señor Fiscal como cualquier ser humano teme a los que muerden. Ellos son capaces de destrozar la honra, la familia, la vida cualquier persona. Tiene razón al temerles. Pero no es justo. No habrá verdadera paz, ni equidad, ni armonía, ni socialismo alguno, mientras estas empresas de la mentira sigan haciendo de las suyas sin recato. La sangre de los caídos el 30-S, el dolor incurable de sus madres, esposas, hijos, hermanos… las huellas grabadas en la carne de los lisiados, el derecho de todo un pueblo que fue violentado ese oscuro día, exige que se pida cuentas y se regule de verdad, a esos negocios politiqueros e inmorales, disfrazados de “medios de comunicación”.

lunes, 29 de septiembre de 2014

UNA ACTITUD IMPRESENTABLE.



Comentario sobre el “manifiesto” del Frente Unitario de los Trabajadores y otros grupos en el Ecuador, septiembre 2014.-

Esta no es una defensa al gobierno, nosotros no tenemos porqué salir a justificarlo, tendrá que hacerlo solo y con sus propios actos. Si alguna posición nuestra cabe respecto a lo que sucede a nivel político en el país, nos remitimos con el debido consentimiento de su autor, al artículo: “La restauración conservadora está en marcha” del Dr. Juan José Paz y Miño, publicado en este mismo espacio el 17 de septiembre de 2014 y que en forma y fondo coincide con nuestra lectura de lo que pasa hoy en Ecuador.

No merecería réplica alguna el mencionado “manifiesto”, dada la insignificante representación que ostenta y la nula ética de sus firmantes, de no ser porque ha sido difundido en algunos países de América Latina, creando confusión.

El FUT (Frente Unitario de los Trabajadores) nació en la década de los setenta, como respuesta a la violencia de todo tipo, implementada por los gobiernos fascistoides y neo-liberales que asolaron al país. Fue una gestación harto difícil, no solo por la represión que se vivía, sino y muy seriamente también, por el permanente boicot de parte de los más “radicales” que lo miraban como expresión de la “burocracia sindical”. Cumplió una labor importantísima en las luchas de muchos años. Pero luego fue aletargándose, sus líderes siendo cooptados por la misma burguesía que combatían y finalmente perdió completa legitimidad ante sus bases, lo que le redujo a un membrete que se rifa al mejor postor.

La CONAIE (Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador), fue el resultado de cientos de años de resistencia y valor, cientos de años de sufrimiento y constancia en medio del horror que significo el genocidio de los pueblos indígenas. Su nacimiento, en el que tuvo una presencia vital e inolvidable Taita Leónidas Proaño y muchas hermanas y hermanos desde la Iglesia comprometida con la vida, marcó un antes y un después en la historia del país. Con que dolor miramos hoy como se ha reducido a un reducto de caciques corruptos, que un día están con las mafias de Gutiérrez, otro con los mismos latifundistas y más tarde con los peores representantes de sus verdugos históricos, como la “Junta Cívica de Guayaquil”, por solo citar un ejemplo. Y la ECUARUNARI, la vena más numerosa y combativa del movimiento indígena, en la misma o peor situación, que indignación provoca contemplar a Pérez Guartambel, su actual presidente en loas y abrazos con agentes descarados de la CIA, como Emilio Palacio o en los cocteles junto a la más feroz oligarquía y como si nada.

Por último, ¿quiénes son los verdaderos actores tras todo esto? Anda por ahí el famoso MPD, que fue, pues ya perdió su personería jurídica, el “brazo público” del maoísmo en el Ecuador.

Con enorme habilidad poco a poco han ido captando los espacios de decisión de estos movimientos e imponiendo su agenda. Se trata de lo más oportunista que ha generado la izquierda en estas tierras, manipulan y azuzan a estos grupos, pues se están jugando en este mismo momento “las joyas de su corona”, aunque parezca increíble, este grupo “marxista-leninista” radicalísimo, ES PROPIETARIO DE UN BANCO CON 430 MILLONES DE DOLARES, SI COMO SE OYE: LOS MAS DUROS “REVOLUCIONARIOS” SON BANQUEROS, han creado y manejado un banco con el dinero tomado por ingenuidad o a la fuerza de los sueldos de los docentes ecuatorianos. La determinación del Estado de tomar control, no posesión de estos millones de dólares, precipita la avalancha en la que se unen todos estos grupos. Y por supuesto, la derecha más afrentosa que, ante el desarrollo de una política simplemente social-demócrata, mirar con terror el futuro, pues intuye, que luego de la social-democracia puede venir, como esperamos y trabajamos para que sea: el socialismo.

La lectura dantesca que hacen de lo que pasa en el país en el mentado “manifiesto”, es tan falsa y sesgada que parece haber sido sacada del libreto de la Embajada Norteamericana, nada raro, nos pintan un Ecuador de los años ochenta, no entienden que el panfleto puede crear euforia muy pasajera , pero luego la realidad lo anula. Nos dicen que estamos en peores condiciones que hace diez años, ¿en qué mundo viven?. No se puede construir edificios sobre el agua, aterricen, los errores y graves del gobierno, hay que enfrentarlos organizando nuevos jóvenes y honestos cuadros que aporten al cambio radical, esta vez sí, de las fuentes de la acumulación de la renta, que es lo que debería venir muy pronto. El Ecuador del “manifiesto” es el que vive en las oficinas mal-olientes de viejos “líderes” desfasados.

Y por lógica sus “planteamientos del pueblo” son un “copie y pegue” del anacrónico “Programa de Gobierno de los Trabajadores, Maestros y Estudiantes “creado a fines de los setenta por los gestores del difunto “MPD”. En el fondo se rebelan contra una institucionalidad que les golpeó en sus “negocios”, acostumbrados a un estado de desorden del que lucraban, les roe no poder seguir manejando a los campesinos e indígenas, con el chantaje del control de las fuentes de agua, no poder seguir manteniendo en la más estúpida ignorancia a los niños indígenas, con el cuento de “escuelas comunitarias” dignas de la edad media. Les asusta el perder control sobre las comunas y sus recursos y que la gente pueda decidir libremente su camino. Lo poco que queda del movimiento sindical, desprestigiado por sus mismas acciones, solo es manipulado para negociar con los patronos. “Curiosamente” dan de gritos contra el “imperialismo chino” - que también es insoportable para nosotros – pero se “olvidan” del su amo gringo. Nada raro. Nos duele hablar de lo que hicieron con la educación fiscal, que fue entregada por los poderosos para que hagan de ella lo que quieran, como un hueso a cambio del saqueo del país, hasta convertir a los ecuatorianos "en el hazme reír" del mundo entero por el desastre de educación que teníamos ¿y a eso quieren volver?.

Con todo esto era de esperarse, lo que sucedió en la marcha “pacifica” que convocaron, una concurrencia muy pequeña, en relación a las movilizaciones históricas del pueblo ecuatoriano y que devino en una salvaje agresión contra todo lo que hallaron a su paso. Si algo, mínimo pudieron conseguir en su realización, lo echaron por la borda con su vandalismo. Y por supuesto ahora son “mimados” y comensales inevitables de los medios de la oligarquía, que los tiene como sus preferidos todos los días y a todas horas.

EL PUEBLO DEBE RECUPERAR SUS EXPRESIONES DE REBELDÍA Y LUCHA, PUES EL SOCIALISMO EN EL ECUADOR, NI SE HA CONSTRUIDO Y NO SE LO HARÁ SIN UNA ORGANIZACIÓN, FUERTE, JOVEN Y HONESTA DE LOS TRABAJADORES Y LOS INDÍGENAS, HAY QUE IR Y RÁPIDAMENTE A LA GENERACIÓN DE UN NUEVO MOVIMIENTO SOCIAL QUE EMPUJE LA RUEDA DE LA HISTORIA HACIA UNA SOCIEDAD NUEVA, PERO ESO NO SE LOGRARÁ CON QUIENES VIVEN AL SERVICIO DEL PODER DE LOS OLIGARCAS, AUNQUE SE LLENEN LA BOCA DICIENDO LO CONTRARIO.

domingo, 28 de septiembre de 2014

RECTIFICAR ES LA ÚNICA MANERA DE CRECER EN HUMANIDAD



Mt 21, 28-32

Jesús acaba de realizar la “purificación del templo”. En el episodio inmediatamente anterior, los sumos sacerdotes y los senadores, preguntan a Jesús con qué autoridad actúa así. Él les responde con otra pregunta: ¿El bautismo de Juan era cosa de Dios o cosa humana? No se atreven a contestar, y Jesús les cuenta esta parábola. Mateo trata de justificar que la comunidad cristiana se apartara del organigrama religioso judío, pero quiere advertir también a la nueva comunidad, que no debe caer en el mismo error.

En este capítulo, siguen las advertencias a la comunidad. Es muy peligroso creerse perfecto. Lo importante es descubrir los fallos y rectificar lo que has hecho mal. La pura teoría no sirve para nada, solo la vida salva. Lo que digamos o lo que proclamemos son palabras vacías, mientras no vayan acompañadas por una actitud vital, que inevitablemente se manifestará en las obras. En el evangelio de Juan, Jesús pone como instancia definitiva sus obras. “Si no me creéis a mí, creed a las obras”.

El domingo pasado nos hablaba de jornaleros mandados a la viña. Hoy nos habla de hijos. Esta diferencia es muy importante. En el AT, el pueblo, en su conjunto, se consideraba hijo de Dios. Jesús distingue ahora dos hijos: los que se consideran verdaderos israelitas y los que los jefes religiosos consideran pecadores. Tenemos que recordar que ser hijo significaba hacer en todo la voluntad del padre. Un buen hijo era el que salía al padre, el que imitaba perfectamente la figura del progenitor. Como consecuencia el que dejaba de hacer la voluntad del padre, dejaba de ser hijo. El preguntar: ¿Quién hizo la voluntad del padre? Es lo mismo que decir: ¿Quién de los dos es verdadero hijo?

Jesús se enfrenta a los jefes religiosos, como respuesta a la radical oposición que ellos le han manifestado. Todos los evangelios dejan clara esa lucha a muerte de las instancias religiosas contra Jesús. Sin embargo, no podemos sacar de estas parábolas argumentos antisemitas. Las prostitutas y los recaudadores de impuestos, que Jesús pone por delante de los jefes religiosos, eran también judíos; y los primeros cristianos eran todos judíos.

Los fariseos no tenían nada de qué arrepentirse, eran perfectos, porque decían “sí” a todas los mandamientos. Consideraban que tenían derecho al favor de Dios, por eso rechazan de plano el cambio que les exige Jesús. Como los de primera hora del domingo pasado exigen la paga justa por su trabajo. Para ellos es intolerable que Dios pague lo mismo al que no ha trabajado. No se dan cuenta de que su respuesta es solamente formal, literal, sin compromiso vital alguno. El espíritu de la Ley les importaba un pito.

El escándalo está servido: Para Jesús no hay duda, los que se consideran buenos son los malos, y los malos son los buenos. Los primeros eran lo estrictos cumplidores de la Ley, los segundos ni la conocían ni podían cumplirla. Los primeros ponían su empeño en el cumplimiento externo de las normas. Los otros buscaban una posibilidad de hacerse más humanos, porque se sabían pecadores. Jesús deja claro cuál es la voluntad de Dios, y quién la cumple. Pero Jesús da a entender que tanto los unos como los otros, son hijos.

Los recaudadores y las prostitutas os llevan la delantera en el Reino. Es una de las frases más hirientes que pudo decir Jesús a los jerifaltes religiosos. Eran las dos clases de personas más denigradas y odiadas por las instancias religiosas. Pero Jesús sabía muy bien lo que decía. El organigrama religioso-social de su tiempo era represivo e injusto. Que esa situación se mantuviera en nombre de Dios no podía aguantarlo quien había descubierto un Dios que lo único que quiere es el bien del hombre. Utilizar a Dios para esclavizar al hombre es lo más contrario al Dios de Jesús.

No se alude en el relato a las otras dos situaciones que se pueden dar: El hijo que dice sí y va a trabajar a la viña; y el hijo que dice no, y no va. En estos dos casos no hay posibilidad de equivocarse ni cabe la pregunta de quién cumple la voluntad del padre. Lo que pretende el relato es advertir sobre el engaño en que puede caer el que interprete superficialmente la situación del que dice “sí” y no va; y del que dice “no” pero va.

No debemos engañarnos. La simplicidad del relato esconde una enseñanza fundamental. Como conclusión general, tenemos que decir que los hechos son lo importante, y que las palabras sirven de muy poco. La praxis prevalece siempre sobre la teoría. Pero el evangelio no nos invita a decir primero no y después sí. El ideal sería decir sí y hacer; pero lo maravilloso del mensaje está precisamente ahí: Dios comprende nuestra limitación y admite la posibilidad de rectificación, después de “recapacitar”, dice el texto.

Nuestras actitudes religiosas son incoherentes. Llevamos muchos siglos haciendo una religión de ritos, doctrinas y preceptos. Desde el bautismo decimos “sí voy” pero nos quedamos siempre en donde estamos. No hay más que ver lo que se entiende por “practicante” para darse cuenta de que no tiene nada que ver con la vida real, sino solo con una serie de obligaciones formales con relación a Dios y a la institución. Nos estamos yendo cada vez más por las ramas y alejándonos de la raíz del evangelio.

Se nos llena la boca proclamando pomposamente que somos cristianos, pero hay muchos que sin serlo, cumplen el evangelio mucho mejor que nosotros. El fariseísmo se ha convertido en moneda corriente entre nosotros, y damos por hecho que basta hablar del evangelio u oír hablar de él para tranquilizar nuestra conciencia. Hay un refrán que lo expresa muy bien: “Una cosa es predicar y otra dar trigo”.

En la primera lectura ya se nos dice que ni siquiera los mayores fallos son definitivos. El ser humano es libre en cada momento y esa actitud es la que vale en última instancia. Podemos en cualquier momento rectificar la trayecto­ria equivocada. Los errores cometidos pueden ayudarnos a encontrar el camino verdadero. Somos limitados y tenemos que aceptar esta condición porque es parte de nuestra naturaleza. No podemos pretender, ni para nosotros ni para los demás, la perfección. Cuando exigimos a un ser humano ser pluscuamperfecto estamos exigiéndole que deje de ser humano. Todo lo que somos lo hemos conseguido a base de corregir errores.

Solo la experiencia me dice qué es lo que me deteriora como ser humano y qué es lo que me enriquece. Cuando damos por absoluta una norma nos anclamos en el pasado y nos negamos a progresar. El gran peligro para esta fijación es creer que Dios nos ha dado directamente esa norma. Desde esa perspectiva se han cometido y se siguen cometiendo hoy verdaderas barbaridades en contra del ser humano. El Dios de Jesús nunca puede ir en contra del hombre; las normas que hemos promulgado en su nombre, sí. Entender la religión como verdades, normas y ritos absolutos, es fundamentalismo puro. Ser hijo de Dios significa imitarle en la búsqueda del bien del hombre.

También hoy podemos ir un poco más allá de la parábola. Ni siquiera las obras tienen valor absoluto. Las obras pueden ser la manifestación de una actitud vital, pero pueden ser reacciones automáticas desconectadas de nuestro verdadero ser, y conectadas solo al interés egoísta. Los fariseos cumplían escrupulosamente todas las normas, pero lo hacían mecánicamente, sin ninguna sinceridad de corazón.

No pierdas el tiempo tratando de situarte en una de las partes. Todos estamos diciendo “no” cada tres por cuatro, y todos estamos diciendo “sí” con una pasmosa ligereza. La vida es una constante rectificación. Lo importante es tomar conciencia de que hay que trabajar por los demás.

sábado, 27 de septiembre de 2014

"Science" elogia al Papa Francisco por su defensa del medio ambiente


El Pontífice ultima su encíclica sobre ecología

Un editorial de la prestigiosa revista norteamericana Science y un artículo destacan que el Pontífice ha ayudado a que la sociedad asuma el compromiso moral de defender la naturaleza. Se apunta como ha apotado a "redirigir nuestra relación con la naturaleza para garantizar la habitabilidad y sostenibilidad futuras de este planeta".

La figura del Papa Francisco parece seguir dando cuenta de gestos innovadores. Esta vez de cara al difícil nexo entre la jerarquía católica y la comunidad científica. Dando cuenta de la nueva etapa que el pontífice argentino ha inaugurado, la afamado revista Science -editada por la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia- publicó un editorial en el que se elogia abiertamente el papel del Papa en la defensa de la naturaleza y se destaca la importancia de los líderes religiosos -en este caso, de la Iglesia católica- en la concientización frente a problemas como la degradación ambiental, el consumo y la pobreza.

En el artículo editorial, titulado "The Pope tackles sustainability" (El Papa aborda la sustentabilidad), se afirma que "la guerra contra la degradación del medio ambiente tiene un nuevo y poderoso aliado: el Papa Francisco".

Asimismo el texto firmado por Marcia McNutt, geofísica y editora jefe en esta revista, recuerda la celebración el pasado mes de mayo de una reunión de estudio y debate, organizado conjuntamente por la Academia Pontificia de las Ciencias y de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales en la Sostenibilidad en el que se aprobaron "algunas de sus declaraciones medioambientales más fuertes hasta la fecha, llamando a todos a asumir la responsabilidad personal y redirigir nuestra relación con la naturaleza para garantizar la habitabilidad y sostenibilidad futuras de este planeta", agrega el editorial.

McNutt explica que los problemas que motivan la toma de posición de parte del Vaticano "no son diferentes de las que se refieren a la comunidad científica: el agotamiento de recursos no renovables, la pérdida de servicios de los ecosistemas, y los riesgos de cambio climático". También se destaca que junto con asumir la importancia de estos problemas desde el punto de vista científico, el Vaticano contribuye a la adopción de medidas recordando que "es nuestra responsabilidad moral de legar un planeta habitable a las generaciones futuras".

Y eso no es todo. En otro artículo de opinión, titulado "Pursuit of the common good" (En busca del bien conún) publicado en el mismo número de Science, los profesores Partha Dasgupta (Universidad de Cambridge, Reino Unido) y Veerabhadran Ramanathan (Universidad de California, en San Diego, EE.UU.) destacan que el liderazgo moral de jerarquías eclesiásticas como la católica pueden tener un papel fundamental en la solución de graves problemas de la sociedad moderna como la pobreza, el consumo y el medio ambiente.

"El auge de la economía de mercado y la búsqueda de un crecimiento en los beneficios y el producto interno bruto (PIB) han fomentado un comportamiento que está en contradicción con la búsqueda del bien común", afirman estos autores.

"Encontrar maneras de desarrollar una relación sostenible con la naturaleza requiere no sólo la participación de científicos y líderes políticos, sino también el liderazgo moral que las instituciones religiosas están en condiciones de ofrecer", apuntan Dasgupta y Ramanathan.

viernes, 26 de septiembre de 2014

El peligro de una tercera guerra mundial

Ketty RomoLeroux G.

keroleg@hotmail.es

En un comentario anterior nos referimos a las conflagraciones mundiales que vivió la humanidad en la primera mitad del siglo pasado. Y cómo, al desaparecer la Unión Soviética en 1991, EE.UU. monopolizó el poder mundial, creciendo los gastos militares vertiginosamente en los últimos años.
El problema de la guerra hoy en día es muy complejo, dado que las grandes transnacionales interesadas en la carrera armamentista la impulsan para alcanzar la superioridad militar y dominar el mundo.
Los cuantiosos gastos de guerra se incrementan sin cesar. Basta recordar que desde el fin de la Segunda Guerra Mundial hasta 1980, los países capitalistas los aumentaron de 24.000 millones de dólares a más de 400.000 millones, llegando en la actualidad a 1,86 billones de dólares.
En los inicios de la segunda mitad del siglo pasado, el mundo estuvo al borde de una nueva guerra mundial. Resulta que, a comienzos de 1962, Cuba y la Unión Soviética conocieron que EE.UU. preparaba una agresión militar contra Cuba. Ambos gobiernos acordaron instalar en el territorio cubano cohetes dotados de ojivas nucleares. Presidente de la URSS era Nikita Kruschov y fue él quien tuvo la idea de colocar las armas.
Así mismo, cuatro submarinos soviéticos, cada uno armado con un misil nuclear, se dirigían por las aguas del Caribe hacia las costas cubanas. Cuando fue informado el presidente Kennedy, inmediatamente ordenó el bloqueo militar a la isla y la movilización de las Fuerzas Armadas estadounidenses a nivel mundial. En Cuba, Fidel y su pueblo estaban seguros de que la invasión se produciría el 29 o el 30 de octubre. Mas, el 26 de octubre llegó la noticia de que los barcos soviéticos se retiraban de la costa de Cuba. Kruschov envió una carta a Kennedy haciéndole saber su disposición de retirar las armas nucleares a cambio de eliminar las medidas del bloqueo y garantizar la no invasión al territorio cubano. Esa misma noche Kennedy da la orden de suspender el bloqueo naval. La vida peligró. Habríamos muerto calcinados.
Lo más esclarecido del pensamiento humano condena las agresiones imperiales. Todos saben que los agresores poseen miles de veces más armas que los agredidos. Lo que obliga a intensificar la lucha por la paz.
Hoy, nuevamente estamos en el umbral de una guerra mundial. El presidente Obama está delineando la estrategia para, con el pretexto de combatir al grupo terrorista Estado Islámico, atacar Siria e Irak. Sin lugar a dudas será un nuevo tipo de guerra. Con armas de destrucción masiva que llevarían a la extinción de la civilización humana.
Con mucha razón, el papa Francisco, un incansable luchador por la paz, eligió el tema 'La fraternidad, fundamento y camino para la paz', como lema de la jornada mundial de la paz en este año. Porque comprende que el derecho a la vida y a la seguridad es el derecho primordial del ser humano. Así como el respeto a la autodeterminación de los pueblos y a la no intervención.

jueves, 25 de septiembre de 2014

3 caminos para cuidar el medio ambiente

 

Pedro Pierre 

pedro.pierre@telegrafo.com.ec

He aquí tres caminos sencillos para preservar y favorecer la vida de la naturaleza. Se trata de cumplir con las tres R: reutilizar, reciclar y reducir. La contaminación no es solo por la culpa de las grandes empresas -que sí contaminan, y bastante-, sino también por el descuido, la ignorancia y la irresponsabilidad nuestra. Muchos turistas están sorprendidos por la cantidad de desechos botados por todas partes, en particular en las calles, las veredas y las carreteras: "¡Qué país tan lindo y tan sucio!". ¿No será por todo esto que tanto nos enfermamos y prolifera mortífero y sin descanso el cáncer entre nosotros? Empecemos una campaña de cuidado del medio ambiente desde nuestra casa y nuestros propios esfuerzos.
Primera consigna: Reutilizar, a fin de no caer de lleno en el vicio del consumismo. La propaganda repetida sin discontinuar durante semanas, meses y años nos ha metido en la cabeza que, para ser felices, hay que comprar mucho, gastar sin parar y botar sin reparo. En nuestra casa muchas veces se amontonan cosas buenas que dejamos tiradas porque 'ya pasaron de moda' y hemos entrado en 'otra onda'… Estas cosas buenas todavía terminan al tacho de la basura. Cuántas cosas podríamos fácilmente reutilizar si no nos dejáramos llenar de falsas ilusiones que se llevan nuestra plata.
Segunda consigna: Reciclar, es decir, dar a las cosas un nuevo ciclo de vida. Los grandes almacenes han comprendido muy bien los métodos para vender siempre más y más mercadería: esta tiene que aparecer o reaparecer como nueva y novedosa. Miremos los carros: desde su invento los motores son fundamentalmente los mismos… pero las carrocerías sí que han cambiado, y siguen cambiando. Envuelven lo viejo de siempre con lo nuevo que nos envuelve a nosotros. Pensamos que un aparato un poco 'viejo' ya no vale y lo arrinconamos hasta que va al tacho de la basura. Reaccionemos. Seamos creativos para dar nueva vida a cuantas prendas y cuantos aparatos se amontonan en nuestros muebles y sobre nuestros armarios. Eso es reciclar.
Última consigna: Reducir. Tal vez eso sea lo más importante, porque demuestra que estamos viviendo de otra manera. Se entiende que necesitamos un mínimo de cosas y de dinero para vivir dignamente. Pero, cuántas cosas inútiles y hasta dañinas compramos sin mayor razón. La vida sencilla ha pasado a ser una virtud olvidada, cuando nos da libertad y voluntad para dedicarnos a actividades que nos humanizan y nos confraternizan. ¿Cuántos libros leemos? ¿Qué tiempos dedicamos a la cultura? ¿Por qué utilizamos tan pocos momentos para encontrarnos, escucharnos, reunirnos, organizarnos y arreglar juntos nuestro entorno?
El tiempo es nuestro para gozarlo inteligentemente y no desgastarlo en actividades vanas y deshumanizantes. A más sabiduría nos invita el libro bíblico de los Proverbios: "A los tontos les perderá su porfía y a los irresponsables su propia dejación. Pero el que me escucha dormirá en paz, no tendrá que temer la desgracia".

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Francisco exige medidas "eficaces e incisivas" para "frenar el tráfico vergonzoso de seres humanos"


"Iglesia sin fronteras, madre de todos", título del mensaje porla Jornada Mundial del Refugiado

El Papa ha exigido acciones "más eficaces e incisivas" para frenar "el tráfico vergonzoso y delictivo de seres humanos", al tiempo que ha afirmado que a la globalización del fenómeno migratorio se debe responder con "la globalización de la caridad y de la cooperación para que se humanicen las condiciones de los inmigrantes". 

En el Mensaje para la Jornada Mundial del Refugiado, que tendrá lugar el próximo 18 de enero y tiene como lema 'Iglesia sin fronteras, madre de todos', Francisco ha criticado los "recelos" y "prejuicios" contra los inmigrantes porque "se oponen al mandamiento bíblico de acoger con respeto y solidaridad al extranjero necesitado". 

El Pontífice ha manifestado la necesidad de una "colaboración sistemática y efectiva" que implique a los estados y organizaciones internacionales para luchar contra "la vulneración de los derechos fundamentales" contra "cualquier vejación, forma de violencia y esclavitud". 

En este sentido, ha valorado sus "generosos y laudables esfuerzos" pero ha incidido en que lo que sirve es "una red universal de colaboración" fundada en la protección de la dignidad y centralidad de la persona humana. Para el Papa, "ningún país puede afrontar por si solo las dificultades implícitas en el fenómeno migratorio y, por ello, pide colaboración basada en la "reciprocidad y sinergia, disponibilidad y confianza".

Por otro lado, ha reclamado una intensificación de los esfuerzos para crear "las condiciones adecuadas" para garantizar una "progresiva disminución" de las razones que llevan a pueblos enteros a "dejar su patria a causa de guerras y carestías, que a menudo se concatenan unas a otras".

En todo caso, el Papa ha querido remarcar a los inmigrantes que ocupan "una lugar especial en la Iglesia", al tiempo que ha resaltado la necesidad de "asumir nuevos compromisos de solidaridad, de comunión y de evangelización". Por ello, ha pedido a la Iglesia "profundizar y reforzar los valores necesarios para garantizar una convivencia armónica entre las personas y las culturas".

Igualmente, ha señalado que para ellos no basta "la simple tolerancia", sino que es necesaria "la vocación de la Iglesia para superar las fronteras" y para favorecer "el paso de una actitud defensiva y recelosa, de desinterés o de marginación a una actitud que ponga como fundamento la cultura del encuentro".

De esta manera, ha comentado que "la Iglesia sin fronteras, madre de todos, extiende por el mundo la cultura de la acogida y de la solidaridad, según la cual nadie puede ser considerado inútil, fuera de lugar o descartable".

"Las migraciones interpelan a todos, no sólo por las dimensiones del fenómeno, sino también por los problemas sociales, económicos, políticos, culturales y religiosos que suscitan, y por los dramáticos desafíos que plantea a las comunidades nacionales y a la comunidad internacional", ha subrayado, citando la Carta encíclica escrita por el Papa emérito Benedicto XVI en 2009.

En esta línea, ha recalcado que a la solidaridad con los inmigrantes y los refugiados "es preciso añadir la voluntad y la creatividad necesarias" para desarrollar mundialmente un orden económico-financiero "más justo y equitativo, junto con un mayor compromiso por la paz, condición indispensable para un auténtico progreso".

martes, 23 de septiembre de 2014

Peor, ¡imposible!

 

¡Miradme, mirad por última vez al único poder del mundo! Reconoced a vuestro verdadero soberano y aprended el miedo. Camus. El Estado de Sitio.

Luego del 9/11 el mundo ha cambiado en favor de la arbitrariedad. Ahora resulta que el Presidente Obama ha decidido bombardear Siria. El galardonado con el Nobel de la Paz, y por lo tanto pacifista, aseguró tener suficiente apoyo internacional para liderar una amplia coalición que garantice la destrucción del Estado Islámico (EI), algo que según él llevará tiempo y no estará exento de riesgos para los implicados. Y uno se pregunta: ¿No le resultaría más fácil y menos costoso eliminar el sustento que hasta ahora otorga a esta organización terrorista? Sí, así de simple. En la sencillez de una solución estriba su belleza.

En Siria va a combatir el terrorismo, el mismo que siempre se ha encontrado bajo la protección del único poder del mundo, del verdadero soberano que inspira miedo. Posiblemente para confundir, y casi lo logra, el terrorismo cambia de nombre como el camaleón de colores; así, el tan aborrecido EI es en resumidas cuentas el denominado Frente Al Nusra, organización terrorista que cuenta con no menos de 15.000 combatientes extranjeros arribados a Siria desde más de 80 países, según informó la CIA a CNN. Una investigación del New York Times informó que 85 aviones militares de carga, con un promedio de 50 toneladas por vuelo, llevaron entre enero de 2012 y marzo de 2013 armas a Turquía destinadas a Siria, aunque en realidad estos embarques comenzaron mucho antes, a raíz del linchamiento de Gadafi, al inició de la llamada insurgencia contra el régimen sirio. Previamente nació el AQI, el Al Qaida Iraquí, creado por los ocupantes estadounidenses para que los iraquíes se destriparan entre sí y poder dividir Irak en tres pedazos devorables.

Al Nusra es la fuerza de choque más importante en Siria, la mejor pertrechada y organizada, la que más éxitos ha logrado en los ataques a las principales instalaciones militares, a las bases de misiles antiaéreos y a los radares de defensa, para lo cual requería de información precisa de inteligencia foránea que es la única que se beneficia al debilitar las áreas de defensa de ese país. Todo esto contradice la afirmación oficial de que la CIA solamente armó y entrenó a rebeldes “moderados”.

Buena es la cosa, resulta que le dan sustento al Frente Al Nusra, la oposición más radical de Siria, para que destruya las instalaciones de defensa de ese país, cuando los terroristas gasean a los mismos niños que previamente había secuestrado, acusan al gobierno sirio de genocidio y cuando para evitar una intervención militar de los EE.UU. este gobierno se desprende de las armas químicas, encuentran el pretexto del EI para de todas maneras hacer la guerra sin declararla.

Por eso es imposible dar crédito a las palabras del Presidente Obama de que es la fortaleza de la organización terrorista del EI lo que lo obliga a perseguirlos “dondequiera que estén”, o sea, en Siria.

Merece que le cambien el Premio Nobel a la Paz por el Premio Novel a la Pastraña.

lunes, 22 de septiembre de 2014

Marina Silva: la que cambió de bando

 

Leonardo Boff

La campaña presidencial se ha acalorado con una disputa abierta entre Dilma Rousseff, actual presidenta y la candidata Marina Silva. En realidad se trata de dos proyectos enfrentados: el mantenimiento por parte del PT de un proyecto progresista, marcado por políticas públicas fuertes que han permitido integrar en la sociedad organizada a una población equivalente a la de Argentina entera. La práctica política de los gobiernos, impuesta por las élites, era la de hacer políticas ricas para los ricos y pobres para los pobres. Pero en nuestra historia ha habido un cambio. Alguien del pueblo llegó al centro del poder y dio otra dirección al poder político. No se puede negar que Brasil en una perspectiva general, especialmente desde la óptica de los pobres, mejoró mucho. Negarlo sería falsear la realidad.

A este proyecto progresista se opone lo que la candidata Marina llama «nueva política». Observada de cerca, sin embargo, no pasa de ser un proyecto conservador y viejo que beneficia a los ya beneficiados y que alinea el país con la macroeconomía voraz que hace que el 1% de los americanos posea el equivalente a lo que gana el 99% de la población. Ese proyecto busca contener el proceso progresista, evidentemente sin anularlo, porque habría sin duda una rebelión popular.

Las opciones del PSB y de Marina Silva representan un retroceso de lo que hemos ganado en estos 12 años. La centralidad no será el Estado republicano que coloca la «cosa (res) pública» en primer plano, el estado dinamizador de cambios que benefician a las grandes mayorías hasta el punto de haber disminuido la desigualdad social un 17% en 12 años. El foco es un estado menor para conceder mayor espacio al mercado, al libre flujo de capitales sin ley, reafirmando las tesis neoliberales: el aumento del superávit primario, que se hace recortando el gasto público, con garrote salarial y desempleo para así controlar la inflación, y finalmente imponiendo la autonomía del Banco Central. Este último punto es especialmente grave porque un presidente también es elegido para administrar la economía (que es parte de la política y no de la estadística) y no entregarla a las presiones de los capitales, de los bancos y de los rentistas. Sería un atentado a la soberanía monetaria del país.

Este viejo proyecto, que ha sido aplicado en Brasil por el gobierno del PSDB, no resultó bien, quebró la economía de la Unión Europea y metió al mundo en una crisis de la cual nadie sabe cómo salir. El efecto inmediato será, como referimos, el garrote salarial y el desempleo junto con el paso de grandes beneficios a los dueños del capital financiero y de los bancos.

Marina quiere gobernar con los mejores de la sociedad y de los partidos, por encima de las alianzas inevitables en nuestro presidencialismo de coalición. Las alianzas se harán, probablemente con el PSDB y con el PMDB y tendrá así que tragar a José Sarney, Renan Calheiros y Fernando Collor que ella tanto abomina. En caso contrario, Marina corre el riesgo de no ver aprobar en el parlamento los proyectos que propone, por falta de base de apoyo.

Quien la escucha y lee su programa parece que hace un paseo por el Jardín del Edén: todo es armonioso, todos son cooperativos y no hay conflictos por choque de intereses. Olvida que vivimos en un tipo de sociedad de mercado (y no solo con mercado) como la nuestra, que se caracteriza por la competición feroz y por la escasa cooperación. Creo que Marina, religiosa como es, se inspira en el sueño del paleocristianismo de los Hechos de los Apóstoles, donde se dice que “la multitud era un solo corazón y una sola alma; nadie consideraba suya la propiedad que tenía; entre ellos todo era común” (Hch 4,32).

Estas opciones muestran claramente que ella ha cambiado de bando. Antes, cuando estaba en el PT, del cual fue una de sus fundadoras, hablaba de la opción por los pobres y por su liberación. Construía en el jardincillo de los explotados y de los que sufren injusticia. Ahora ella construye en el jardín de sus opresores: los adinerados, los bancos, el capital financiero y especulativo. Les lleva el ladrillo, el cemento y el agua. Sus asesores en economía son todos neoliberales. Los siringueros de Acre y la familia de Chico Mendes, éste colocado entre las elites, figuran en una desafortunada y hasta insultante formulación hecha por Marina. Ellos son conscientes de que fueron agentes de todas esas élites quienes lo asesinaron; por eso, protestaron vehementemente contra su opción y reafirmaron la tradición del PT apoyando a la candidata Dilma.

Mi sospecha es que Marina persigue el poder y busca alcanzar la presidencia por un proyecto personal, cueste lo que cueste. Se dice por ahí que una profetisa de su iglesia evangélica, la Asamblea de Dios, profetizó que Marina sería presidenta. Y ella cree ciegamente en eso como cree en lo que diariamente lee en la Biblia, pasajes abiertos al azar como si ahí se revelase la voluntad de Dios para ese día. Son las patologías de un tipo de comprensión fundamentalista de la Biblia que sustituye a la inteligencia humana y a la búsqueda colectiva de los mejores caminos para el país.

¿Estoy siendo duro en la crítica? Lo estoy. Y lo hago para alertar a los lectores y lectoras sobre la responsabilidad de elegir una presidenta con tales ideas. Ya nos equivocamos dos veces, con Jânio y con Collor. No podemos permitirnos equivocarnos ahora que la humanidad pasa por una grave crisis global, social y ambiental, que reverbera en nuestro país. No debemos desistir de lo que ha dado buen resultado y que todavía debe ser profundizado más y enriquecido con nuevas políticas públicas.

domingo, 21 de septiembre de 2014

PENSAR QUE DIOS NOS DEBE ALGO, ES RIDICULIZARLE

Mt 20, 1-16

También hoy el evangelio va dirigido a la comunidad. Cuando se escribió este evangelio, las comunida­des llevaban ya muchos años de rodaje pero seguían incorpo­rando nuevos miembros. Los más veteranos seguramente reclamaban privilegios, porque en un ambiente de inminente final de la historia, los que se incorporaban no iban a tener la oportunidad de trabajar como lo habían hecho ellos. La parábola advierte a los cristianos que no es mérito suyo haber accedido a la fe antes, sería ridículo esperar mayor paga.

El contexto inmediato es muy interesante. Jesús acaba de decir al joven rico que venda todo lo que tiene y le siga. A continuación, Pedro se destaca y dice a Jesús: “Pues nosotros lo hemos dejado todo. ¿Qué tendremos?” Jesús le promete cien veces más, pero termina con esa frase enigmática: “Hay primeros que serán últimos, y últimos que serán primeros”. A continuación viene el relato de hoy, que repite, al final, la misma frase pero invirtiendo los términos; dando a entender que la frase de marras se ha hecho realidad.

Las lecturas de los tres últimos domingos han desarrollado el mismo tema, pero en una progresión de ideas interesante: el domingo 23 nos hablaba de la corrección fraterna, es decir, del perdón al hermano que ha fallado. El 24 nos habló de la necesidad de perdonar las deudas sin tener en cuenta la cantidad. Hoy nos habla de la necesidad de compartir con los demás sin límites, no con un sentido de justicia humana, sino desde el amor. Todo un proceso de aproximación al amor que Dios manifiesta con cada uno de nosotros.

Hoy tenemos una mezcla de alegoría y parábola. Esto hace más difícil una interpretación adecuada. Sabéis que en la alegoría, cada uno de los elementos del relato significa otra realidad en el plano trascendente. En la parábola, es el conjunto, el que nos lanza a otro nivel de realidad a través de una quiebra en el proceso lógico de la historia narrada. Está claro que la viña hace referencia al pueblo elegido, y que el propietario es Dios mismo. Pero también es cierto que en el relato, hay un punto de inflexión cuando dice: “Al llegar los primeros pensaron que recibirían más, pero también ellos recibieron un denario”.

Desde la lógica humana, no hay ninguna razón para que el dueño de la viña trate con esa deferencia a los de última hora. Por otra parte, el propietario de la viña actúa desde el amor absoluto, cosa que solo Dios puede hacer. Lo que nos quiere decir la parábola es que una relación de toma y daca con Dios no tiene sentido. El trabajo en la comunidad de los seguidores de Jesús, tiene que imitar a ese Dios y ser totalmente desinteresado. Si tomásemos en serio esta advertencia, ¿qué quedaría de nuestra religiosidad?

Con esta parábola, Jesús no pretende dar una lección de relaciones laborales. Cualquier referencia a ese campo en la homilía de hoy no tiene sentido. Jesús habla de la manera de comportarse Dios con nosotros, que está más allá de toda justicia humana. Que nosotros podamos imitarle es otro cantar. Desde los valores de justicia que manejamos en nuestra sociedad, será imposible entender la parábola.

Hoy todo el mundo trabaja para lograr desigualdades; es decir para tener más que el otro, estar por encima y así diferenciarse de él. Esto es cierto, no solo respecto a cada individuo, sino también a nivel de pueblos y naciones. Incluso en el ámbito religioso se nos ha inculcado que tenemos que ser mejores que los demás para recibir un premio mayor. Ésta ha sido la filosofía que ha movido la espiritualidad cristiana de todos los tiempos. Lo que propone la parábola es algo completamente distinto.

Se trata de romper los esquemas en los que está basada la sociedad que se mueve únicamente por el interés. Como dirigida a la comunidad, la parábola pretende unas relaciones humanas que estén más allá de todo interés egoísta de individuo o de grupo. Los Hechos de los Apóstoles nos dan la pista cuando nos dicen: “lo poseían todo en común y se distribuía a cada uno según su necesidad”.

Hay una segunda parte que es tan interesante como la misma parábola. Los de primera hora se quejan del trato que reciben los de la última. Se muestra aquí la incapacidad de comprensión de la actitud del dueño. No tienen derecho a exigir, pero les sienta mal que los últimos reciban el mismo trato que ellos. El relato demuestra un conocimiento muy profundo de la psicología humana. La envidia envenena las relaciones humanas hasta tal punto, que a veces prefiero perjudicarme con tal de que el otro se perjudique aún más.

En realidad lo que está en juego es una manera de entender a Dios completamente original. Tan desconcertante es ese Dios de Jesús, que después de veinte siglos, aún no lo hemos asimilado. Seguimos pensando en un Dios que retribuye a cada uno según sus obras (el dios del AT). Una de las trabas más fuertes que impiden nuestra vida espiritual es creer que podemos y tenemos que merecer la salvación. El don total de Dios es siempre el punto de partida, no algo a conseguir gracias a nuestro esfuerzo.

Hoy podemos ir incluso más allá de la parábola. No existe retribución que valga. Dios da a todos los seres humanos lo mismo, porque Dios se da a sí mismo y no puede partirse. Dios nos paga antes de que trabajemos. Es una manera equivocada de hablar, decir que Dios nos concede esto o aquello. Dios está totalmente disponible a todos. Lo que tome cada uno dependerá solamente de él. Si Dios pudiera darme más de lo que me ha dado y no me lo diera, dejaría de ser Dios. Lo que Dios es no puede depender de mí.

La obra salvadora de Jesús no está encaminada a cambiar la actitud de Dios para con nosotros; como si antes de él, estuviésemos condenados por Dios, y después estuviésemos salvados. La salvación de Jesús consistió en manifestarnos el verdadero rostro de Dios y cómo podemos responder a su don total. Jesús no vino para hacer cambiar a Dios, sino para que nosotros cambiemos con relación a Dios, aceptando su salvación. No sigamos empeñándonos en meter a Dios por nuestros caminos.

Con estas parábolas el evangelio pretende hacer saltar por los aires la idea de un Dios que reparte sus favores según el grado de fidelidad a sus leyes, o peor aún, según su capricho. Por desgracia hemos seguido dando culto a ese dios interesado y que nos interesaba mantener. En realidad, nada tenemos que “esperar” de Dios; ya nos lo ha dado todo desde el principio. Intentemos darnos cuenta de que no hay nada que esperar y abrámonos a su don total, que es ya una realidad, aunque no lo hayamos descubierto.

El mensaje de la parábola es evangelio, buena noticia: Dios es para todos igual: amor, don infinito. Queremos decir para todos sin excepción. Los que nos creemos buenos y cumplimos todo lo que Dios quiere, lo veremos como una injusticia; seguimos con la pretensión de aplicar a Dios nuestra manera de hacer justicia. Cómo vamos a aceptar que Dios ame a los malos igual que a nosotros. Debe cambiar nuestra religiosidad que se basa en ser buenos para que Dios nos premie o, por lo menos, para que no nos castigue.

El evangelio propone cómo tiene que funcionar la comunidad (el Reino). ¿Sería posible trasladar esta manera de actuar a todas las instancias civiles? Si se pretende esa relación imponiéndola desde el poder, no tendría ningún valor salvífico. Si todos los miembros de una comunidad, sea del tipo que sea, lo asumieran voluntariamente, sería una riqueza humana increíble, aunque no partiera de un sentido de trascendencia.

sábado, 20 de septiembre de 2014

LA ACCION PROFETICA DE LAS COMUNIDADES ECLESIALES DE BASE (CEBs) HOY. (2 de 2)

 

Ponencia de Padre Numa Molina S.J. en el Encuentro Nacional de las CEBs de Venezuela

Acción Profética de las CEBs hoy en América Latina

Si nos acercamos más al origen inmediato, el primero lo constituye el concilio Vat. II: "En lontananza —confiesan las mismas comunidades— se vislumbra el impulso del Vaticano II... Probablemente ahora queda atrás, pero ahí está el impulso inicial".

En esta línea América Latina es pionera en la organización y consolidación de las CEBs, de modo especial la experiencia brasileña. No olvidemos que el Concilio Vaticano II con todo lo que él significó, su contenido estaba muy influenciado por la teología europea. La cosmovisión de la Iglesia de Roma no alcanzaba a entender aun el modo de ser Iglesia en AL con todo lo que para aquel momento significaba la realidad política de este continente plagado de dictaduras y con un nivel de subdesarrollo que por otra parte era ocultado por unos, justificado por otros y desconocido por la mayoría del mundo. Es por ello que el episcopado latinoamericano se ve en la obligación de adaptar la nueva realidad conciliar de la Iglesia a AL y convocan la segunda Conferencia del Episcopado Latinoamericano en Medellín, agosto de 1968. Medellín es la versión del Concilio adaptada a la realidad latinoamericana.

En medio de ese contexto eclesial comienza a consolidarse un nuevo modo de ser cristianos que ya hundía sus raíces antes del Concilio Vaticano II. Este movimiento de la Iglesia de Base cuenta también con la animación de teólogos y pastoralistas que comulgaban con las corrientes renovadoras de la teología en América Latina. Nombres sobresalientes como Leonardo Boff, Gustavo Gutiérrez, Jhon Sobrino y figuras prominentes de obispos como Angelelli en Argentina, Proaño en Ecuador, Helder Cámara y Casaldáliga en Brasil, Romero en El Salvador y Sergio Méndez Arceo en Méjico por mencionar solo algunos distribuidos en tres décadas, se convirtieron en compañeros de camino de las CEBs en AL con su voz y con su praxis pastoral. El Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) con sus cinco Conferencias ha fluctuado entre luces y sombras respecto a las CEBs. Medellín se convirtió en su carta de identidad no obstante más tarde en Puebla ya la reflexión fue más temerosa. No pretendo aquí hacer historia del transcurrir de la CEBs y el CELAM. Baste solamente fijar la mirada en lo que a la conferencia de Aparecida se refiere. No fue fácil abordar este tema en el seno de la Conferencia de Aparecida. Como en otras conferencias hubo sus resistencias, el texto pasó por cuatro redacciones diferentes y una final que fue corregida por Roma y es la que tenemos. Veamos solamente el texto que fue a Roma y el que regresó (ver presentación en videobeam).

Como vemos, ya el mismo hecho de haber sido cuestionada por Roma es una prueba de que las CEBs juegan un papel preponderante en la Iglesia Latinoamericana. Eso no podemos verlo solamente como algo negativo en sí, es una honra que los grandes teólogos de El Vaticano se hayan ocupado del tema aunque fuera para modificarlo irrespetuosamente. Si alguien conoce de los intrículis y sinsabores para llegar a este texto es el para entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio hoy Papa Francisco quien tuvo mucho que ver en esa cuarta redacción que luego resultó modificada.

Retos

Comienzo con un refrán muy nuestro “tanto nadar para morir en la orilla?” no es posible. Tanta historia martirial, ¿tantas y tantos profetas en esta América latina y el Caribe como para que ahora nos apoltronemos y dejemos esta Iglesia nuestra a la deriva? El reto es grande hermanas y hermanos. La denuncia se tiene que hacer efectiva con nuestra organización, con nuestra vida de compromiso al mismo tiempo que anunciemos la vida. Pero la dimensión profética de las CEBs no llegará sin la escucha de la Palabra. Ahora bien, este es un profetismo que debe surgir como el profetismo de aquellas primeras comunidades cristianas que en medio del atropello, de la persecución y de la lucha diaria estaba como música de fondo Jesús Resucitado y resucitador de la vida de los pueblos. Aquí nos haría mucho bien desempolvar los documentos de Aaparecida todos en clave de discipulado.

Aquellas comunidades se comenzaban a tornar incómodas y proféticas en la medida que anunciaban a Jesús Resucitado, porque él era la antítesis del sistema muerte establecido. Aquellas primeras comunidades creían en la vida hasta más allá de la muerte. Y era que la reunión para la escucha de la Palabra y la comunión del pan único y partido no era un rito, no era un precepto dominical que había que cumplir, era el ejercicio de hacer presente la vida, la tortura, la muerte y la Resurrección de un Jesús que se había entregado por ti y por mi. En otras palabras, no pueden existir comunidades proféticas sin una experiencia, sin un conocimiento de Cristo. Es urgente el hacernos discípulas y discípulos como nos lo propone Aparecida.

Ignacio de Loyola nos dirá que el amor a Cristo se acrecienta más en la misma medida que nos decidamos a conocerlo más. Y allí comienza lo profético de mi vida tanto individual como colectivamente en la CEBs. Veíamos antes que el ser místico y profeta son dos realidades íntimamente unidas. Se es místico en la medida que Jesús se va convirtiendo en lo más nuclear de nuestra vida, por eso el apóstol Pablo terminará afirmando “ya no vivo yo es Cristo que vive en mi” (Gal. 2,20). Y ese Cristo nos irá enseñando a vivir una mística de ojos abiertos como a aquel doctor de la Ley que fue por doctrina y Jesús le abrió el entendimiento para que entendiera que es al lado del hombre o la mujer heridos, en el que sufre, donde hago la voluntad del Padre. La vida eterna desde cada uno y desde cada CEBs se alcanza eternizándose en el tiempo, amando en esta historia como Jesús. Las comunidades se harán proféticas en la medida en que se hagan samaritanas, transidas de amor por y comprometidas con los procesos de vida al mismo tiempo que valientes denunciantes de todo aquello que conduzca a la muerte.

Ante el invierno eclesial que vive América Latina el Papa Francisco nos llama a vivir la intemperie y el riesgo de una Iglesia en salida, es decir en camino, peregrina. Una Iglesia que se ensucia los pies en los barriales de la historia eso deben ser nuestras CEBs si queremos ser proféticas. Nuestro grito de profetas va a ser creíble para esta sociedad cuando sea producto de la vivencia de fe en el resucitado porque lo hemos visto en el rostro de los sufridos. No podemos ser profetas de profesión, no estamos llamados a ser profetas por herencia, profetas de sangre azul, no, esta humanidad tantas veces escandalizada por el silencio cómplice de sus pastores necesita de la presencia de comunidades cristianas capaces de denunciar la muerte del inocente y de anunciar los tiempos nuevos. Nos guste o no, vivimos en Venezuela un invierno eclesial caracterizado por el silencio y la prudencia cómplice de muchos de quienes tenemos la misión de pastoreo, la misión de acompañar al pueblo en sus luchas y de alimentar sus esperanzas. Necesitamos comunidades cristianas que maduren al calor de la Palabra orada, meditada. Comunidades capaces de interpretar los signos de los tiempos y con la franqueza evangélica para decir a los pastores como el Profeta Isaías: “Los centinelas de Israel son ciegos, Ninguno sabe nada. Todos son perros mudos que no pueden ladrar, Soñadores acostados, amigos de dormir” (Isaías 56,10).

El Cómo y el cuándo.

La vida de las comunidades cristianas es en el mundo, en la historia. No somos extraterrestres ajenos al quehacer humano. Justamente ahí radica nuestro compromiso de ser sal y luz de la tierra, de ser fermento en la masa, de ser semilla de mostaza. Pero estas parábolas se dan en la historia concreta y en el devenir de nuestras comunidades. Por eso tenemos que recurrir a los recursos que nos ofrece el medio. Es necesario formarnos cada día también en el tema de la organización comunitaria, hay que formarse en una serie de áreas como la pedagogía para que nuestro modo de transmitir la Palabra sea eficaz. Hoy no podemos pretender ser levadura en la masa si no estamos dispuestos a hacernos, como dijo el papa Benedicto “misioneros en el continente digital” Sin olvidar lo esencial necesitamos comunidades donde cada miembro pone sus talentos para que el Reino acontezca. Hoy necesitamos una fundación debidamente registrada que haga de persona jurídica para los trámites que así lo exijan. Las CEBs deben comenzar un proceso desde ya de recaudación de fondos para que cada vez que la movilidad sea posible y para que eventos como este no nos obliguen a depender de la suerte de que encontremos o no el espacio. Tenemos que comenzar a formarnos en lectura orante de la Palabra, hay que leer buenos libros que nos ayuden para nuestra formación, todo eso encaminado a que mientras más pulidos estemos como instrumentos más se podrá servir el Señor de nosotros para que acontezca su Reinado.

El Cuándo? Eso era para ayer. Pero no es tarde, este congreso no puede pasar como un evento más, sería una pena. Este Congreso de las CEBs de Venezuela 2014 debe quedar en la historia como el congreso de la REFUNDACION DE LAS COMUNIDADES de Base de Venezuela. Debe quedar como el congreso donde caímos en la cuenta del compromiso profético que todas y todos tenemos. Que este encuentro nos abra los sentidos espirituales para que podamos mirar en profundidad y con ternura esta muchedumbre inmensa de venezolanas y venezolanos que caminan como ovejas sin pastor, y preguntan cuándo la Iglesia pueblo de Dios, la Iglesia de base, la de los de a pie se va a poner en camino. Los cambios en la Iglesia y en cualquier realidad societaria no vienen de arriba hacia abajo, es decir los cambios no se decretan, se construyen y brotan desde el subsuelo de los pueblos con la paciencia del sembrador que nos narra Jesús en Mc. 4, 26-29. A nosotros hoy nos corresponde preparar la tierra y colocar la semilla, si esto lo hacemos y lo hacemos bien y lo hacemos cuando lo teníamos que hacer, de lo demás se encarga el Señor. Ya vendrán los frutos maduros, no será necesario permanecer ansiosos esperando que germine. Pongamos todo lo que nos toca en esta hora eclesial y solo así el día de mañana tendremos una Iglesia robusta. El santo Padre nos está dando línea, nos está animando, no esperemos que sean los Obispos o los sacerdotes quienes van a generar esos cambios que estos tiempos nos reclaman, es la iglesia de base, la iglesia madura de hombres y mujeres insertos en las encrucijadas del mundo quienes van a hacer que nazca una humanidad nueva. Digamos con el apóstol “Venezuela sufre dolores de parto y nos toca a nosotras y nosotros partear la Iglesia nueva, comprometida, samaritana que haga presente el rostro de Cristo en esta tierra. AMEN.

viernes, 19 de septiembre de 2014

LA ACCION PROFETICA DE LAS COMUNIDADES ECLESIALES DE BASE (CEBs) HOY. (1 de 2)


 

Ponencia de Padre Numa Molina S.J. en el Encuentro Nacional de las CEBs de Venezuela

Definición de profeta y profetismo.

Profeta es una palabra derivada del griego profetenein que significa “hablar en nombre de la divinidad”, revelar algo oscuro. De ahí que ejercer el oficio de profetes (anunciador) nunca significa predecir. En la traducción de los LXX la palabra hebrea nabí algunas veces se hace derivar de nabá que significa “brotar”. Mejor es entonces esta derivación de nabá que en asirio significa “anunciar, nombrar” y en árabe “comunicar”. Es, como vemos, un término ligado a la acción de comunicar, transmitir un mensaje importante para un pueblo.

El profetizar se atribuye generalmente a la acción del espíritu de Yavé (1Sam 10,6) “Te invadirá el Espíritu del Señor, te convertirás en otro hombre y te mezclarás en su danza. Cuando te sucedan estas señales, haz todo lo que sea conveniente porque el Señor está contigo”. Al profeta también se le llama “hombre de espíritu” como en Os. 9,7 Llega la hora de la cuenta, llega la hora de la paga, -que se entere Israel-, por tu gran culpa, por tu gran subversión. El profeta es un loco, el hombre inspirado delira. Aclaro que el hebreo nabí tiene el mismo significado fundamental que el griego profetes.

Amós en 7, 10-16, nos revela que en su tiempo existían los profetas de profesión que se ganaban el sustento anunciando la palabra de Dios. Amós niega que él sea profeta o hijo de profeta. Él era un pastor de vacas y agricultor que se dedicaba a cultivar higos. Yavé fue a su encuentro cuando estaba pastoreando su rebaño. Lo que le diferencia de los profetas de profesión es la llamada particular que le hace Yavé. Aunque Amós es respetuoso de aquellos profetas y los considera guías del pueblo suscitados por Yavé no considera que estos profetas recibieran ese encargo de modo particular por parte de Yavé.

Miqueas se distancia de modo enérgico de los profetas de profesión “que declaran la guerra a quien no les llene la boca” (3,5.8).

Había profetas que tanto Miqueas 3,5 como Amós 7,12-13 denuncian como falsos profetas porque se dejaban llevar más del ansia de ganar que del amor a la verdad.

Las afirmaciones anteriores nos iluminan para comprender entonces que profetismo en esta línea es la acción y el movimiento generado por los profetas en contra de la muerte y a favor de la vida. El profeta es alguien que se ha dejado iluminar por el mensaje divino, lo entiende con claridad y lo transmite así a sus oyentes. Por eso los verdaderos profetas fueron constantemente incomprendidos por las sociedades de su tiempo.

Ahora bien, el profeta cristiano hoy, para serlo, tiene que haber pasado por la experiencia mística, que no significa una experiencia exclusiva de una élite espiritual, sino un modo creyente, evangélico de mirar y de interpretar las realidades. Una actitud reverente frente a la Palabra de Jesús para dejar que ella se transforme en préctica en el sujeto que la escucha y la asimila. El profeta es alguien con capacidad de releer los signos de los tiempos en clave de Cristo y desde allí interpretarlos, “La divinidad, por ello, irrumpe y se hace con la presencia del profeta, no tanto para comunicarse con él en la intimidad, sino para hacerle pronunciar su palabra salvífica. Lo decisivo en este tipo de relación no es, por tanto, que Dios se comunica haciéndose sentir, sino que Dios habla para que se hable” (Carlos Domínguez Morano, Místicos y profetas: dos identidades religiosas). El profeta, agrega Domínguez, “es un sujeto que constituye su identidad como ser llamado y convocado… Y si la llamada le aísla de su condición, de su paisaje y de su deseo, el envío le ata y le religa de nuevo al pueblo. Pero ya con una identidad marcada: la del portavoz de una palabra liberadora”.

El profeta es una persona arrojada, en salida como dirá el Papa Francisco, su espacio paradigmático será la plaza, la calle, el mundo.

El profeta no es un fanático, éste, el fanático, habla no como portavoz de la divinidad sino como la misma voz del Absoluto. El profeta en cambio, sabe que Dios lo precede, que es siempre mayor y vive atento a su Palabra de la que se considera solo un transmisor. Conoce y es humilde para aceptar su diferencia entre él y Dios y nunca tiene la osadía de identificarse con la totalidad que Él representa.

Primeras Comunidades proféticas, su vida y sus consecuencias de ser proféticas

El documento de Aparecida al referirse a las Comunidades Eclesiales de Base (CEBs) señala que “Ellas recogen la experiencia de las primeras comunidades, como están descritas en los Hechos de los Apóstoles” mientras que Medellín las reconoció como “una célula inicial de estructuración eclesial y foco de fe y organización” (Med. 15).

Ahora bien, cuando nos remontamos a las primeras comunidades cristianas de Hechos, constatamos que hay un perfil característico que las define como genuinamente cristianas, es decir, que viven según el proyecto de Jesús, que anhelan la realización de un modo de vida donde haya igualdad de oportunidades “para que ninguno pase necesidad” y eso solo se logra poniéndolo todo en común. Que nadie tenga excedentes, los excedentes van a un depósito común y son de todos. Es tan radical que quienes ingresaban sin una verdadera rectitud de intención por vivir la experiencia de la fraternidad eran excluidos de la comunidad no por que se estuviese faltando a la fraternidad sino porque el proyecto de Jesús es inviable con personas que aún no han comprendido la fraternidad como la opción de vida sin la cual es imposible construir el Reinado de Dios. Otra nota resaltante en esa comunidad era la libertad, allí se vivía una espiritualidad liberadora porque, como le dijo Pablo los Gálatas “para ser libres nos ha liberado Cristo” (Gal. 5,1). Los que antes eran esclavos ahora son libres una vez que pasan a formar parte de las comunidades (Film 15, 17).

No quiero seguir abundando en más detalles porque creo que estos dos, la comunión de bienes y la libertad, son suficientes como para comprender la dimensión tan revolucionaria que encarnaban estas nuevas comunidades cuando las estudiamos en el contexto de aquella sociedad, constituida por estratos sociales en los que las personas nacían y morían como una suerte de fatalidad sin remedio.

El tema de la Eucaristía o Cena del Señor es otro elemento a considerar para entender el tema de la inclusión y la igualdad en estas nuevas comunidades: Sucedió que Pablo había dejado un pequeño núcleo de comunidad cristiana en Corinto que se fue acrecentando. Allí en aquella comunidad ingresaban personas de los diferentes estratos de aquella gran ciudad portuaria. Se hacían cristianos los pescadores, artesanos, agricultores y también los empleados públicos o lo que hoy llamaríamos “personas de clase media” Sucedió que Pablo se enteró cómo la reunión para celebrar la Cena del Señor se había convertido en un encuentro de grupos privilegiados que llegaban primero y consumían de sus buenas provisiones y hasta se emborrachaban mientras que los que llegaban de último, que generalmente era la gente que hacía trabajos humildes sometidos a largas jornadas, se tenían que conformar con comerse las sobras y Pablo los amonesta indignado ( 1Cor. 13,17).

Así que el solo imaginar el surgimiento de unos grupos sociales organizados que se llaman COMUNIDADES CRISTIANAS en medio de aquel modelo de sociedad excluyente contiene, a mi modo de ver, un germen profético que se hace denuncia en sí mismo desde dos perspectivas:

1. Que el proyecto de Jesús llamado Reino de Dios no fracasó, está vivo. Es una de las pruebas de que Él está resucitado.

2. Esa vida nueva se hace profética en sí. Las nuevas comunidades cristianas están compuestas por hombres y mujeres “de Espíritu” (son nabí), es decir que hablan de lo viven y viven lo que hablan. En aquel novedoso modo de vivir hay una coherencia entre la palabra y la obra, que se hace profética e incómoda para el “estatus quo”. Ante una sociedad de muerte que había sepultado en vida a una inmensa mayoría por ser pobre, por ser enferma, por ser mujer, por ser viuda, por ser estéril, por ser pecadora, las primeras comunidades cristianas anuncian la vida y la igualdad para todas y todos. Pero simultáneamente con su misma fraternidad a toda costa están denunciando las injusticias y la muerte que aquel sistema generaba. Es necesario hacer notar que el porcentaje más alto de quienes adversaron a las nuevas comunidades cristianas estaba constituido tanto por líderes religiosos como por funcionarios políticos del poder civil. Ambos grupos veían en estos cristianos un peligro inminente para su clase social, para su estatus. La pérdida de privilegios y la mayoría de edad de unas clases, que hasta ese momento se creían destinadas a morir en la periferia pero ahora eran tomados en cuenta como ciudadanos. Este modo de actuar era el mismo del Maestro de Nazaret y los hacían repudiables para los privilegiados de siempre.

La dimensión profética de aquellas nuevas comunidades brota espontáneamente. La primera y más notable característica del auténtico profeta es la incomprensión. El profeta anuncia la vida y los poderes de este mundo apuestan por la muerte. El profeta desenmascara la mentira, la mediocridad, la hipocresía mediante una vida cargada de verdad, de eficiencia, de transparencia. Y todas esas características eran propias de las Primeras Comunidades Cristianas. Después vendría la persecución.

Una nota característica del profeta es que por ser portador de un mensaje de VIDA que no le pertenece y del cual no duda, le es imposible claudicar, está convencido de su autenticidad. Aparece entonces como consecuencia lógica la amenaza, la persecución y la muerte. Eso mismo sucede en colectivo, la primeras comunidades las encontramos a lo largo del Asia Menor semiocultas, empleando lenguajes cifrados y salvando audazmente la vida.