MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

viernes, 3 de agosto de 2018

Padre Pedro Pierre: En el ojo del huracán


Padre Pedro Pierre

Me refiero a Nicaragua. Varios meses de enfrentamientos han dejado varios centenares de muertos y pocos signos de solución. Primero se puede decir que sorprendieron las votaciones su favor 3 veces seguidamente desde 2,006 por sus postura que distan mucho de la revolución sandinista de los años ’70: unión con el arzobispo Obando cardenal de la ‘Contrarrevolución’ apoyada y financiada por el gobierno de Estados Unidos, alianza con los partidos de derecha, escándalos sexuales por las acusaciones de su hija, su mujer vicepresidenta, sus políticas que van más en sentido capitalista que revolucionario, etc. Al mismo tiempo hay que reconocer ciertas políticas a favor de los sectores populares, su apoyo a los gobiernos progresistas de América Latina y su antiimperialismo norte americano.

Tal vez sea este último punto el que nos da la clave principal de los disturbios en el país: Vemos cómo el gobierno de Trump no admite gobiernos latinoamericanos que no se alinean totalmente con su ideología. Además los disturbios están decididamente apoyados por los grupos de derecha y ONG financiadas desde Estados Unidos. Hay seguramente una significativa oposición nacional al gobierno, porque el desempleo, sobre todo juvenil, está muy alto con la angustia que produce frente al futuro. Miremos también el caso de nuevas elecciones: En esta situación actual, ¿quiénes subirían al gobierno?

Bien se puede decir que nuestras democracias latinoamericanas no funcionan… sabiendo que favorecen prioritariamente a los grupos de derecha. Por eso que en Ecuador están volviendo a recuperar su poder económico a costa del empobrecimiento y marginación de los mayoritarios sectores populares. Nuestras democracias y su sistema educativo en definitiva impiden al pueblo en general a conocer sus derechos, formarse políticamente, organizarse para dar a conocer sus necesidades y decidir sobre los caminos adecuados para resolverlas. Por estas mismas razones estamos en Ecuador en lo que estamos.

Ya Jesús lo decía, como voz en el desierto hasta hoy: “Jesús los llamó y les dijo: "Como ustedes saben, los que se consideran jefes de las naciones actúan como dictadores, y los que ocupan cargos abusan de su autoridad. Pero no será así entre ustedes.”